ALBARRÁN, Marvin; LINARES, Jored; MARÍN, María y PÉREZ, Ana
Perspectivas. Revista de Historia, Geografía, Arte y Cultura de la UNERMB
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Su sistema de creencias religiosas estaba fundado en el politeís-
mo. A doraban al sol Ches y a la luna Chia. El sentido de la
vida matriarcal se reejaba en la posición que asumía la mujer,
como efecto natural de prodigalidad, expresada en la diosas
Icaque, cuyo templo, ubicado en la tierra de los Escuqueyes,
signicaba el centro adoración religiosa, al que acudían cada
período determinado, desde todas las parcialidades, para brin-
darle tributo a la diosa por las bondades recibidas. Y la manse-
dumbre de la naturaleza también se imponía en la conciencia
colectiva, pues el “espíritu” de los animales se consustanciaba
con la del hombre, a través de guras alusivas al poder de los
mismos (Contreras, Ob cit: 31).
Con respecto a lo antes citado, se puede deducir que los cuicas al igual
que otros grupos étnicos se encontraban en una de las primeras etapas de
expresión religiosa en la cual se asocian las vicisitudes del entorno o los
fenómenos que alteran el ritmo de la vida cotidiana con los elementos na-
turales como son: el sol, la luna y la tierra dándoles categorías de dioses
omnipotentes. Con este tipo de creencias es que surgen los shamanes quie-
nes son los intérpretes de los dioses, en las tribus cuicas eran llamados Toy,
y a ellos se les atribuyen poderes sobrenaturales y la capacidad de prede-
cir los augurios que deparaban las deidades. Para sus rituales de adoración
construían altares, en este sentido hace mención (Rengifo, ob cit:18) que
estos sitios sagrados era donde se “tributaban ovillos (madejas) de algodón y
sartas (collares) de piedrecillas o conchas marinas (quitero) muy apreciados
entre ellos”, estos elementos servirían de ofrendas para agradecer o calmar la
ira de sus regentes divinos.
Por otra parte, también existía una manifestación cultural basada en la
utilización de un muñeco llamado Chorote que era controlado por hilos y
parecía que cobraba vida gracias a los conjuros y rápidos movimientos rea-
lizados por los Toy, así lo expresa (Briceño, ob cit: 30) que era un “muñeco
de barro en forma de hombre, que los cuicas hacían correr o bailar por
magia espacial que infundía miedo o al menos despertaba la curiosidad de
los ingenuos” , era una expresión cultural que permitía dar a conocer a los
miembros de la tribu los poderes sobrenaturales que poesía el shaman sobre
los objetos inanimados y sus vínculos con los seres divinos, además con esta