
Perspectivas. Revista de Historia, Geografía, Arte y Cultura de la UNERMB
Año 4 N° 7/ Enero-Junio 2016 / ISSN: 2343-6271
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ción actual centra exageradamente lo académico y lo técnico, ocasionando
una disociación de lo humano (Zuleta, 2012). Esta educación excesivamente
intelectiva forma individuos centrados en sí mismos, y en el aspecto material,
visible de la existencia, la cual no se percata de que se están formando actitu-
des egoístas, despreocupadas del deterioro que se va dando en sus vínculos,
con la naturaleza y con el Planeta Tierra.
1.5. La formación de la mentalidad humana
La Mentalidad constituye la síntesis dinámica de cada sociedad, al deter-
minar las conductas y los pensamientos de sus miembros; gobierna sus creen-
cias y con relación a ella se plantean sus problemas y sus preocupaciones.
A partir de los estudios sobre el proceso de desarrollo humano; se señala la
existencia de una conguración mental que se relaciona directamente con la
creatividad, el aprendizaje, el éxito en la vida, tanto individual como colectiva
Según Pichon Rivière (1981) dependiendo del sentido que el individuo
atribuye a las situaciones, construye una representación mental del mundo y
de sí mismo que condiciona afectos, decisiones, la comunicación y el apren-
dizaje. La interpretación del mundo constituye un paradigma sujeto a ajustes
continuos, dependiendo de la realimentación proveniente de la vinculación
con el entorno. Además este autor (op. cit:173-174), arma que, dependien-
do del campo de interacción entre ambos; la base de la construcción de la
personalidad y de la representación de sí mismo, es la internalización ecoló-
gica del hábitat como totalidad, que incluye la imagen de sí, y que condiciona
la imagen del mundo, congura modelos, pautas, esquemas referenciales que
operan en la interpretación de la realidad. La percepción puede alterarse al
condicionarse una imagen distorsionada del mundo exterior (1981:28).
Según este autor (op cit), la mentalidad congura desde las edades tem-
pranas de la vida; sin embargo, dependiendo de las elecciones conductua-
les realizadas consciente o inconscientemente, está sujeto a cambios, a partir
de la experiencia práctica con otra forma de vivir, bajo otros principios. En
una nueva interacción, las representaciones mentales antiguas generadoras
de prejuicios y creencias erradas pasan a ser confrontadas con la experiencia
personal del “aquí y ahora”, posibilitando nuevas y mejores interpretaciones
de lo que se vive, vínculos más sanos, armónicos y productivos.
El sentimiento de vincularse con todo lo existente es fundamental para
el desarrollo evolutivo de todo ser humano, por ello se necesita educar de
manera explícita comportamientos de alto nivel humano y actitudes que fo-